lunes, 22 de agosto de 2011

Memorias de Africa

Os pongo aquí el artículo que estos días aparecerá en el diario de Burgos del viaje que hemos hecho en el mes de julio a Tanzania.

MEMORIAS DE ÁFRICA

Acabamos de llegar de Tanzania. Seis burgaleses, pertenecientes a la Ongd Persona Solidaridad, hemos pasado tres semanas en el corazón de África y ahora, ya de vuelta, nos gustaría contaros lo que nos ha llevado a emprender este sorprendente viaje.

La historia empezó hace 4 años, el primer contacto con el África Subsahariana y con aquellas gentes: los wahehe.

Conocimos al Padre Daniel, un misionero incansable que fue un excepcional guía en nuestros comienzos. Él nos mostró una iglesia muy distinta a la que conocíamos y gracias a él fuimos conociendo las luces y las sombras de unas gentes que luchan con mucho esfuerzo por salir adelante. Aquel viaje nos permitió conocer a la Fundación Agrónomos sin Fronteras y a unos ingenieros que nos asombraron con su dedicación y sus ganas de hacer este mundo un poco más habitable. Desde entonces no hemos dejado de colaborar con ellos. Merece la pena apoyar a jóvenes que tratan de hacer, con muchos sacrificios, de la cooperación al desarrollo su profesión y su forma de vida.

Este verano hemos vuelto dispuestos a seguir conociendo un país acogedor y a unas gentes que llevan impreso el dolor de unas vidas difíciles y, a la vez, la alegría de la sencillez y de la ilusión por mejorar sus vidas.

Sabíamos que sería un viaje distinto, donde debíamos llevar bien abiertos los ojos y el corazón, dispuestos a dejarnos “morder” por esa África que tanto nos dice. Sin duda nosotros hemos sido los más beneficiados de una experiencia, que en buena parte, ha sido para adentro.

Hemos podido conocer los dos grandes proyectos agrícolas que Agrónomos sin Fronteras gestionan en Ihanzutwa y en Pawaga, en las tierras altas de Tanzania, en dos zonas muy deprimidas donde otras ong no han llegado. Su audacia les ha permitido adentrarse en un país que poco tiene que ver con el nuestro y promover un desarrollo integral y sostenible. Ahora están preparando el tercer proyecto que llegará a Kilolo. No sabemos si aparecerá en los mapas o tal vez lo puedan encontrar en Google. Es posible que no.

Desde Burgos y a través de la Junta de Castilla y León, se ha financiado una guardería-escuela infantil cerca del primer proyecto. La demandaron las propias mujeres del pueblo que debían ir al trabajo con el bebé sobre sus espaldas. Ya no volverán a hacerlo. La chekechea, como la llaman en swahili, da cabida a casi 150 niños que podrán recibir una atención temprana y jugar con otros niños, como hacen los niños en muchas partes de nuestro mundo. Y tienen material escolar y juguetes y dos profesoras bien formadas y un tazón de comida antes de regresar a sus casas. Un grupo de mujeres, las “wamama wa upendo” han sido, junto a los miembros de la Fundación, los artífices de este bonito ejemplo de que las cosas pueden ir a mejor, de que Tanzania y África pueden ir levantando la cabeza aunque sea con un pequeño empujón por nuestra parte.

Nos gustaría contaros cómo fue la inauguración. El recibimiento, los bailes wahehe (aquí podéis ver un ejemplo: http://www.youtube.com/watch?v=CeP8Okks7OE), los cantos, la alegría que transmite esta gente,… pero es difícil de explicar. Hay que vivirlo. Hay que atreverse a salir de la tierra que a uno le vio nacer y aventurarse a aprender de los pobres y los sencillos.

¿Qué nos traemos? El saber vivir con menos cosas y el valorar los pequeños gestos de cada día que allí conllevan tanto sacrificio (habréis adivinado que estamos hablando, por ejemplo, de todo lo relacionado con el agua).

Tras el viaje queda el retorno a lo cotidiano, dispuestos a seguir trabajando por un mundo más justo, sin desigualdades, donde todos tengamos las mismas oportunidades.

Vivimos aquí pero ahora ya tenemos un poco más la mirada puesta en el Sur. Desde este verano, África está un poco más cerca y seguro que volveremos.